jueves, 5 de septiembre de 2013

Jornada de Oración y Ayuno por la Paz en Siria, Medio Oriente y en el Mundo entero.


Quilmes, 03 de septiembre de 2013

Queridos hermanos:
Haciéndome eco del anuncio del Papa Francisco, donde nos convoca a  la Jornada de Oración y Ayuno por la paz en Siria, Medio Oriente y en el mundo entero, para el próximo sábado 7 de septiembre, los invito a unirnos en nuestra súplica al Dios de la Paz, para que conceda el tan deseado don de la paz , especialmente en este tiempo, a estos pueblos martirizados por la guerra.
El Papa Benedicto XVI ya nos decía al comenzar este año, en el Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz:"...las numerosas iniciativas de paz que enriquecen el mundo atestiguan la vocación innata de la humanidad hacia la paz. El deseo de paz es una aspiración esencial de cada hombre, y coincide en cierto modo con el deseo de una vida humana plena, feliz y lograda. En otras palabras, el deseo de paz se corresponde con un principio moral fundamental, a saber, con el derecho y el deber a un desarrollo integral, social, comunitario, que forma parte del diseño de Dios sobre el hombre. El hombre está hecho para la paz, que es un don de Dios..."
Así, con estas palabras en nuestro corazón, confío en que cada uno de ustedes encontrará las iniciativas que les parezca más oportunas en sus comunidades, a fin de corresponder a este llamado evangélico, en comunión con la Iglesia universal.
Por mi parte, extenderé este deseo a las Iglesias hermanas de otras confesiones religiosas. Vean también ustedes de invitar a otros hermanos y hermanas de su jurisdicción parroquial a la oración en común.
Que este deseo  del Santo Padre, unirnos como Iglesia en la oración y el ayuno, sea nuestra mejor contribución en la búsqueda de la paz. 


+ Carlos José Tissera
Obispo de Quilmes

miércoles, 4 de septiembre de 2013

ORACIÓN POR AL PAZ - propuesta del Papa Francisco


Compartimos el mensaje que envía el Rector Mayor de los Salesianos a todos los Hermanos y Hermanas de la Familia Salesiana en unidad con la propuesta del Papa Francisco.
 
"Mis Queridos Hermanos y Hermanas de la Familia Salesiana. Un cordial saludo a todos vosotros, con el afecto que Don Bosco tenía por todos sus Hijos e Hijas

El motivo de este mensaje a toda la Familia salesiana es el de fijar vuestra atención en lo que el Santo Padre nos ha comunicado con ocasión de la oración del Angelus del pasado domingo, 1 de septiembre. Él ha dirigido a la Iglesia y al mundo entero estas palabras:

Hoy, queridos hermanos y hermanas, quisiera hacerme intérprete del grito que, con creciente angustia, se levanta en todas las partes de la tierra, en todos los pueblos, en cada corazón, en la única gran familia que es la humanidad: ¡el grito de la paz! Es el grito que dice  con fuerza: queremos un mundo de paz, queremos ser hombres y mujeres  de paz, queremos que en nuestra sociedad, desgarrada por divisiones y conflictos, estalle la paz; ¡nunca más la guerra! ¡Nunca más la  guerra! La paz es un don demasiado precioso, que tiene que ser  promovido y tutelado".

Como ven es una llamada angustiosa que se refiere en primer lugar a la dolorosa situación de Siria, envuelta desde hace tiempo en una guerra civil, y en segundo lugar es una invitación a no olvidar los otros numerosos conflictos que atormentan a tantas regiones y poblaciones de los diversos continentes.
Para sensibilizar a la Iglesia y a todos los hombres de buena voluntad sobre este importante tema de la paz, el Papa Francisco ha concluido su apelación diciendo: “He decidido convocar para toda la Iglesia, el 7 de septiembre, una jornada de ayuno por la paz en Siria y en el mundo. De las 19 a las 24 nos reuniremos en oración y en espíritu de penitencia par implorar este don de Dios. La humanidad tiene necesidad de ver gestos de paz. Pido a todas las comunidades que organicen algún acto litúrgico según esta intención. Os espero el próximo sábado a las 19 en la Plaza de San Pedro”
.  
Queridos todos, animados por el mismo espíritu de nuestro Padre común, Don Bosco, os exhorto ardientemente a acoger este deseo del Santo Padre como un mandato que con convencimiento y amor debemos realizar. Todos nosotros creemos que la paz es un bien extraordinariamente necesario para el desarrollo y el progreso de la comunidad nacional e de la comunidad mundial. Ella se nutre del respeto de los derechos fundamentales que deben ser garantizados a los pueblos y a las personas y, al mismo tiempo, viene edificada por la observancia de los deberes igualmente importantes  que nacen de estos mismos derechos.

Deseo  por tanto invitar a todos los grupos de la Familia Salesiana a acoger concretamente la exhortación del Santo Padre haciendo del día 7 de Septiembre un día de oración, de reflexión y de ayuno para dar al mundo un testimonio de que creemos firmemente en el gran valor de la paz y para pedir este mismo don del  “Príncipe de la Paz, Cristo Resucitado, vencedor de la muerte!  

Concretamente,  invito a todos aquellos que, en el ámbito de la región de Roma puedan estar materialmente presentes en la Plaza de San Pedro, a este gran momento de oración y de ayuno. A aquellos que viven en otros contextos, a participar activamente en las diversas iniciativas que ciertamente serán promovidas por cada una de las iglesia locales.
  Toda comunidad y toda realidad educativa, en el límite de lo posible, procure animar tres momentos
  •  
Un momento de oración por la paz, vivido sobre todo como adoración eucarística, preparada por un ayuno particular; alimentando la oración con textos bíblicos o textos tomados de documentos de la Iglesia sobre el tema de la paz

Un momento de educación en la paz. En las escuelas, en los oratorios, en otros contextos educativos, ofrecer a los jóvenes un encuentro sobre el tema de la paz, proponiéndoles una reflexión a partir de las noticias de actualidad sobre el tema, presentado el valor del texto de la encíclica de Juan XXIII “Pacem in terris”, de otros documentos de la Iglesia y también de textos significativos de autores laicos.
Proponiéndonos ayudar a los jóvenes a madurar en el  convencimiento de que la paz se construye sobre cuatro valores fundamentales: la verdad, la justicia, el amor y el perdón.

Un momento de testimonio sobre la paz. Es posible celebrar comunitariamente un momento de reconciliación comunitaria, invitando también a nuestros laicos y a los jóvenes, durante el cual pidamos perdón a Dios de nuestras divisiones y de nuestros conflictos, pequeños y grandes. Es posible también invitar a los laicos relacionados con nosotros a un encuentro de reflexión y de profundo discernimiento sobre el tema de la paz. Debe ser conocido por todos que la paz interesa a cada grupo y a cada comunidad de la Familia Salesiana 

Queridos, se los agradezco.  Sé que acogerán mi invitación con generosidad y empeño. Estoy seguro de poder expresarles el agradecimiento del Santo Padre y el de nuestro amado Padre Don Bosco.

Un saludo a todos ustedes. María, Reina de la Paz y Auxilio de los Cristianos, acompañe su camino.

Roma, 3 de Septiembre de 2013